El abejero europeo (Pernis apivorus), un pájaro rapaz migratoria que permanece de abril a septiembre en España, podría ser un aliado natural del hombre para combatir la avispa asiática. El abejero se alimenta preferentemente de avispas y moscardones, y, según un estudio que se está realizando en Galicia, la avispa asiática constituye actualmente una parte importante de su dieta.
Desde Galicia, una de las zonas de la geografía española más castigadas por la presencia de la avispa asiática (Vespavelutina), llegan noticias positivas en cuanto al control de esta preocupante especie invasora. Desde hace años, apicultores, técnicos e investigadores buscan encontrar un método eficaz y natural para combatir este insecto sin perjudicar a otras especies, como pasa por ejemplo con las trampas, donde quedan otros insectos atrapados. Curiosamente, no es un entomólogo sinó un ornitòleg quién está actualmente investigando un posible remedio natural para la avispa asiática: el abejero europeo (Pernisapivorus).
José Manuel Fernández, ornitólogo e integrando de un equipo de investigación dirigido por Salvador Rebollo, profesor de Ecología de la Universidad de Alcalá de Henares, participa en un estudio que trata de averiguar si este pájaro rapaz se alimenta mayoritariamente de la avispa asiática. Aunque, como explica este experto, el abejero no sería la solución definitiva al problema de la velutina, si que podría contribuir a equilibrar la presencia de la avispa en los ecosistemas.
Según la Sociedad Española de Ornitología (SUYO-Birdlife), el abejero europeo es un ave rapaz estrechamente ligada a las áreas boscosas, que está presente en la época estival en el norte de la península, desde Galicia en el País Vasco y parte de la costa catalana, y que emigra en invierno hacia África. Para adaptarse a sus singulares preferencias alimentarias por una rapaz, avispas y moscardones (preferentemente sus larvas), el abejero sincroniza su ciclo reproductor y su migración con el periodo de mayor abundancia de estos insectos.
Para manipular panales y avisperos, el abejero cuenta con unas adaptaciones morfológicas muy particulares, como un pico corto y fino para extraer fácilmente las pupas de los panales, unos dedos protegidos por escamas para evitar la acción de los aguijones, y los párpados inferiores cartilaginosos más duros que en otras rapaces. Aunque es una especie poco estudiada y no se conocen con gran precisión sus poblaciones (SEDE calcula que entre 900-1.300 abejeros repartidos por la zona norte), José Manuel Fernández destaca que en los puntos de Galicia donde están llevando a cabo sus estudios se constata un crecimiento de la población de la rapaz, que coincide con el auge de presencia de la avispa asiática.
Para estudiar el consumo de avispas asiáticas por parte de la rapaz, los investigadores colocaron cámaras y sensores de movimiento a los nidos de abejero detectados, con el objetivo de monitorizar su dieta. De este modo comprobaron que el 70% de los panales que los adultos extraían a los nidos para alimentar a las crías eran de celdas grandes. Fernández afirma que solo se pueden tratar de panales de dos especies, o de la avispa asiática o de la Avispa Crabro. Para salir de dudas, han recogido muestras en nidos y sus alrededores para analizarlas molecularmente y diferenciar la proporción de avispa asiática dentro de este 70%.
A la espera de los resultados, el ornitólogo considera que mayoritariamente se trata de avispa asiática, puesto que al acceder a los nidos para colocar las cámaras encontraron siempre presencia de la avispa asiática y no de Avispa Crabro. También, en las muestras recogidas, algunas de las larvas no ingeridas pudieron ser identificadas y siempre se trató de avispa asiática. Sobre la base de los citados indicios y teniendo en cuenta que la población de abejeros se ha duplicado a raíz de la expansión de la avispa asiática, José Manuel Fernández considera que, probablemente, el abejero se alimenta mayoritariamente de la Avispa Velutina.
Así pues, considera que es necesario proteger a este pájaro porque continúe ejerciendo de depredador natural de la avispa asiática. A partir de los pisos de panales encontrados en los nidos de los pájaros estudiados, el ornitòleg ha hecho mención de una estimación realizada sobre el consumo de avispas asiáticas. Conociendo la densidad de abejeros que había en la zona, estimando la cantidad de paneles que estaban consumiendo las crías al día más el número de días que están allí, y fijando un tamaño mediano de los nidos, se realizó una estimación de 700 panales, de un mínimo de 500 a un máximo de 1.000 nidos de avispas que pudieron eliminar en cada una de las zonas.